La vida parece lenta
mientras la estamos gastando.
Cambiamos de opinión cuando
hemos llegado a sesenta.
Grabado en letra de imprenta
leemos ya en nuestra frente:
“Caminante, ten presente
el destino que te aguarda;
comprobarás que no tarda
aunque andes lentamente.»
Filed under: Poemas |
Deja una respuesta